martes, 23 de junio de 2009

Pervivencia del Clasicismo: BIZANCIO

Plato de plata. Siglo VI. Constantinopla.
Pieza proveniente del museo del Ermitage (San Petersburgo). Datada en tiempos del emperador Justiniano, fechada entre 527-65 después de Cristo. Muestra una escena pastoril directamente entroncada con el arte helenístico.

La temática bucólica o pastoril es un refererente del arte clásico tomado de la literatura que, posteriormente, se afianzaría en el arte occidental como el tópico del Locus Amoenus (lugar ameno).

Es una representación de una naturaleza idealizada, agradable, donde sus habitantes viven en paz y son felices.

No tiene ninguna relación con la vida real en el campo, sólo toman la forma y no el contenido. Es una manera de evadirse del ajetreado modo de vida urbano, proyectándose en el sosiego de la vida pastoril, en comunión con la naturaleza.

Esta paz que mostraba el género se hizo muy popular en sarcófagos (como metáfora del tránsito a una nueva vida) y en frescos urbanos (para desconectar del ajetreo diario una vez que se refugiaban en su hogar).

Polifemo y Galatea, fresco romano de la villa de Agripa Póstumo en Boscotrecase. S. I dC

2 comentarios:

  1. Hecho de menos alguna descripción sobre la técnica del repujado en plata, sobre su composición, simbología...

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