No es Pompeya. Ni Herculano, ni un museo de Roma. Es la necrópolis de Carmona, con uno de los escasos ejemplos de pintura mural encontrados en Hispania.
Representación mitológica de la diosa romana en esmalte, montada en su carro celestial y coronada con halo (como Helios) y media luna. Llamativo sobretodo por un estilo que más se asemeja al arte del siglo XX que al clásico.