
En plena edad dorada de Hollywood, las estrellas (y aspirantes a serlo) jugaron con el imaginario popular para igualarse a los grandes héroes de la antigüedad.
Los nuevos dioses de la sociedad se promocionaron con fotografías en la que emulaban y recreaban algunas obras de arte clásicas.

Este es el caso de
George O'Brien, actor norteamericano habitual en los repartos de Jonh Ford y especializado en
westerns.
Hoy en día nos pueden sorprender estas imágenes destinadas a dar a conocer a las estrellas al gran público por lo aventurado de su concepto, siendo algunas de estas imágenes excesivamente indiscretas para lo que entenemos que era el puritanismo de esa época.