Hace apenas un mes que se ha hecho público que este fresco descubierto hace una década había sido expuesto en el museo de Israel. Muestra a María y a Juan Bautista suplicando el perdón de Jesús en nombre de la humanidad. Sólo la parte inferior de las figuras son visibles en la pintura principal: Jesús sentado en el centro, María a su derecha, y Juan Bautista a su izquierda. Lo que más nos interesa con respecto a la herencia clásica es el friso central de roleos con una cita en latín de San Agustín: “Quien daña el nombre de un amigo ausente, no puede asistir a su mesa como invitado”.
El roleo es un elemento decorativo que se compone a base de motivos enrollados, de volutas que se enrollan sobre sí mismas, de cilindros de origen espiral, etc
Su origen se encuentra en el Mediterráneo oriental y fue exportado a todas las culturas de la cuenca del Mare Nostrum. En la península ibérica, por ejemplo, ya era utilizado el arte ibero antes de la llegada de griegos y romanos (tomado sin duda de los fenicios)
En este ejemplo bizantino vemos la versión más clásica del roleo, como muestra del anclaje que la cultura greco-romana tuvo durante el milenio que la edad media ocupó.
Vaso de Hamilton, 325 a.C
No hay comentarios:
Publicar un comentario